Hijo del siglo
“¿Qué hay para ti en el siglo ajeno?”
Séneca, el Retórico
Que la luz te posea
y le hables a la luz
Predica en el desierto
Donde se hace elocuente
la lengua del lagarto
Predica en el desierto
Donde el verde asediado
acoraza su savia
Predica en el desierto
Donde el sol meridiano
acucia a la materia
Predica en el desierto
Entre curvas de sueño
bajo sueños de agua
Predica en el desierto
Entre inmensos silencios
donde canta la sed
Predica en el desierto
Con la arena sagrada
metiéndose en la boca
Predica en el desierto
Rodeado por la sombra
de sombras asombradas
Predica en el desierto
Bajo el rayo radiante
la belleza instantánea
Predica en el desierto
En la luz implacable
en la luz seductora
Predica en el desierto
Mientras dice el simún
y el resplandor estalla
Predica en el desierto
Ante pesados cielos
que inundan tu cabeza
Predica en el desierto
Con la noche solar
y luna al mediodía
Predica en el desierto
Y sólo de estar solo
tu soledad se sacie
Predica en el desierto
Que te laven los vientos
el alma la mirada
Predica en el desierto
Y que te vuelvas hueso
y que dejes el ansia
Predica en el desierto
Y que el hueso desnudo
nueva arena se haga
Predica en el desierto
Contra todo confort
sin seducción sin trampas
Predica en el desierto
En el rocío mínimo
la lluvia te acompaña
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20.10.09
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1 comentario:
Bellísimo
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